lunes, 8 de marzo de 2010

Consejos para elegir la corseteria con vestido de novia

¿Que lenceria encaja con tu vestido?


Te damos las claves para que descubras qué tipo de lencería encaja mejor con tu vestido de novia.

El conjunto de ropa interior que llevarás el día de tu casamiento no es una elección fácil. Y no sólo por la cantidad de modelos y cortes que hay en el mercado, sino porque a veces no resulta fácil encajar la corseteria que nos gusta con el tipo de vestido que hemos elegido.

Al fin y al cabo es como el amor, hay que encontrar esa química mágica que hace que se adapten y saquen lo mejor el uno del otro. Conscientes de las dificultades que a veces entraña esta elección, hemos tratado de encontrar esas parejas perfectas de corseteria y vestido, que se adaptan a la silueta de tu diseño nupcial como un guante.

La primera ecuación parece fácil: vestido con escote palabra de honor más corpiño sin breteles.

Sin embargo, el hecho de estar habituadas a llevar los modelos más tradicionales con breteles a veces hace que nos sintamos del todo cómodas con menos sujeción. Para evitarlo, trata de elegir un diseño con relieves de silicona que te den seguridad.

Otro caso puede ser que tu vestido sea de fino encaje y que, aunque no llegue a transparentarse, sí que se intuya la ropa interior. Hacè de este punto débil una ventaja y optà por un conjunto de raso y encaje que parezca más bien hecho para ser lucido.

Si tu problema es que llevas un escote profundo, también hay soluciones. Hay marcas de corseteria que disponen de modelos especiales para que el corpiño pase desapercibido.

Por el contrario, si optaste por un vestido de silueta tipo sirena y se te marca la ropa interior, optà por un conjunto con culotte y, si puede ser, con pocas costuras: al ser más ancho se notará mucho menos.

Y, para terminar, si tu vestido es de silueta lánguida, aprovecha para ponerte sencillamente el que más te guste. Eso sí, optà por recuperar el portaligas: es sexy, lindo y, sobre todo, de lo más práctico para no tener que estar pendiente de que las medias se te caigan.


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